El pasado 12 de mayo entró en vigor la obligación del registro de jornada por parte de las empresas.
Esta modificación del artículo 39.4 del Estatuto de los Trabajadores establecía una vacatio legis. No obstante, este tiempo prudencial en su entrada en vigor, no ha impedido que a la mayoría le haya pillado desprevenido.
Esta nueva obligación ha generado innumerables dudas, tanto por parte de empresarios como por parte de trabajadores.
Ante este desconcierto, el Ministerio de Trabajo ha publicado la Guía de Registro de Jornada para intentar resolver las dudas suscitadas.
Para facilitar el entendimiento de esta guía, en Celer Legal hemos elaborado un pequeño resumen con las 3 claves más relevantes para entender esta importante novedad:
El registro de jornada se aplica a la totalidad de trabajadores, a todos los sectores de actividad y a todas las empresas. El requisito esencial es que se trate de trabajo por cuenta ajena dentro del ámbito de organización y dirección del empresario.
Esta obligación incluye a los trabajadores “móviles”, comerciales, temporales, trabajadores a distancia o cualesquiera otras situaciones en las que la prestación laboral no se desenvuelve, total o parcialmente, en el centro de trabajo de la empresa.
Peculiaridades: En las relaciones laborales de carácter especial debemos atender a su normativa especifica:
La obligación de registro de jornada se aplica a todos los trabajadores por cuenta ajena
Será válido cualquier sistema, en soporte papel o telemático, fiable, inmodificable y no manipulable a posteriori, ya sea por el empresario o por el propio trabajador. La información de la jornada debe documentarse en algún tipo de instrumento escrito y/o digital, que garanticen la trazabilidad y rastreo fidedigno e invariable de la jornada diaria una vez de registrada.
El registro debe documentarse en un sistema fiable e inmodificable
Estas especialidades quedan en manos de la negociación colectiva. Hasta ahora muchas empresas permitían estas salidas, y por tanto se computaban como jornada de trabajo.
Habrá que analizar caso por caso, puesto que la mayoría de convenios recogen pausas para el bocadillo y se computa como jornada de trabajo.
La mayoría de convenios recogen estas pausas como parte de la jornada de trabajo
A pesar de los intentos por resolver las dudas generadas en la aplicación de esta obligación de control horario de los trabajadores, todavía quedan situaciones por resolver, pretendiendo el Gobierno que muchas de estas cuestiones se regulen a través de la negociación colectiva.
Si tienes alguna duda sobre si tu empresa está cumpliendo adecuadamente con la obligación del control de las horas trabajadas, no dudes en contactarnos.
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